Los mismos están identificados como Punto Amarillo— ubicados en lugares visibles y accesibles para que los vecinos puedan desechar correctamente los productos farmacéuticos. Esta medida busca prevenir riesgos para la salud y proteger el medio ambiente, a través de una correcta gestión de residuos patológicos. También se desarrollará una campaña de concientización para informar sobre los peligros de acumular medicamentos en el hogar.