En estos tiempos aparecieron denuncias de abusos en niños en forma más frecuente de lo habitual. La sociedad está cambiando y se animan muchas más familias a presentarse ante la justicia para exponer sus problemas.
Sobre este tipo de abusos en menores, Diario de la Mañana habló con la Psicóloga Ana Paula Scarpecci: "Lo central que está pasando con los menores es que, si bien no tiene una comunicación de tipo verbal en algunos casos, sí tiene un vínculo con los adultos que los crían y serían ellos los encargados de decodificar lo que les ocurre, darse cuenta de lo sale de la rutina habitual.
Cada papá tendría que estar atento a cada cambio en el carácter o la actitud porque no se van a enterar porque ellos se lo digan de manera verbal.
Los chicos que van bien en la escuela, que adquirieron ciertos conocimientos y en un momento los pierden, dejan de ir bien en el colegio, ese es un indicio de que algo está pasando, que les debería llamar la atención. Es algo importante lo que le está pasando, salvo que hayan pasado por algún momento familiar desagradable como la pérdida de un ser querido, que eso sí sería una causal de los cambios en su carácter.
Los abusos sexuales, generalmente se dan en el ámbito familiar, pero es difícil darse cuenta de ello porque quizás la otra persona que puede llegar a notar esos cambios, también sea víctima del abusador".
Habló sobre el caso del abuso de una niña de seis años en nuestra ciudad: "Me parece que lo importante en este caso, del que no conozco detalles, es que se pueda escuchar al niño y que después se haga todo lo posible en la justicia para que el caso se resuelva. La primera responsabilidad es escuchar a la niña y creer en el testimonio del menor. Creer implica actuar en consecuencia, no lo desmerezco, no lo minimizo, después veremos la solución. No dejar desamparado al chico es importante.
A los niños hay que escucharlos, no pueden inventar una mentira, en algunos casos pueden armar un relato de ficción pero vienen de parte de otros, no los van a inventar ellos. Hay que utilizar todos los recursos para saber qué vivencia tuvo o si atravesó algo que la puede perturbar. Es un tema muy complicado para todos, incluso para la justicia. Hay grises muy importantes en este tipo de situaciones y caso a caso cambia lo que pueda suceder. Hay que apuntar a la prevención, poner en manos de los chicos todas las herramientas para que cuiden su cuerpo, su higiene, establecer quiénes pueden tocar su cuerpo y en qué situaciones, a qué edad puedan higienizar su cuerpo y que papá o mamá pueda tocarlos, el respeto que tiene que tener el médico por el cuerpo del niño, que si se siente avasallado lo pueda definir, enseñarle las cosas como son, por su nombre y que se pueda construir una confianza con los adultos que los están criando, para que puedan hablar todo con ellos, las cosas que los incomodan por distintos motivos. Van a contar todo pero también hay que diferenciar cuáles son las emociones.
Hay que estar atento a percatar lo que puede estar sucediéndole, si hay cambios bruscos y que pueden en la escuela manifestarse más y donde se pueden dar cuenta más rápido".